Para evitar que la comida se eche a perder debemos guardarle en el lugar ideal, así se mantendrá en optimas condiciones. Algunas personas lo hacen en el congelador, y aunque suena como una buena opción, existen alimentos que no se deben meter ahí y aquí te decimos cuáles son.
Comida con contenido alto en grasa: Productos como la crema batida, la mayonesa o el queso azul, se vuelven aceitosos cuando se meten al congelador, llegando a ser incomestibles.
Alimentos fritos o empanizados: Al meterlos en el congelador pierden su textura y lo crujiente que pueden ser luego de cocinarlos.
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Productos lácteos: En el momento que los sacamos del congelador, productos como la leche, la crema o el yogurt, tienden a separarse y volverse granulosos, lo que también afecta su sabor, volviéndose más ácido.
Huevos con cáscara: Si metemos los huevos al congelador podemos provocar que se echen a perder, debido a que, en el proceso de congelación, el interior se llega a expandir, provocando que la cáscara se quede quieta y exponiendo el producto a las bacterias.
Frutas o verduras con pulpa blanda: Estos son otros tipos de alimentos que pierden su textura en el momento que se descongelan, pues se vuelven blandos y acuosos.
Vegetales con alto contenido de agua: Lo mismo sucede con vegetales como el pepino, la lechuga, el tomate o el apio. Congelarlos podría dañar su estructura molecular y su textura.
Beneficios de congelar la comida
A pesar de lo anterior, congelar la comida es una gran manera de lograr que se mantenga en el mejor estado posible, pues las bajas temperaturas ayudan a eliminar cierto tipo de bacterias, siempre y cuando su proceso de descongelación sea el adecuado.
Del mismo modo, guardar alimentos en el congelador es una forma de ahorrar un poco de dinero, ya que, al hacerlo, se evita que estos se echen a perder y así no se desperdicia la comida.
J.R