Uno de los ingredientes que no puede faltar a la hora de preparar los alimentos es la cebolla, un alimento muy rico en nutrientes y minerales. Sin embargo, no a todas las personas les gusta su sabor picoso ya que a veces no es compatible con el platillo elaborado. Para evitar esto, te diremos cómo puedes quitárselo sin modificar su sabor.
Lo que debes hacer es llenar un bol o tazón con agua y bastante hielo, tras eso deberás poner la cebolla, ya sea en rodajas, julianas o cubos de cebolla. Habrá que dejar reposar por unos 15 o 20 minuto y con estos simples pasos notarás que el sabor picoso ha desaparecido y quedarán muy crujientes.
Otra forma de lograr quitarle lo picoso a la cebolla sin modificar su sabor es realizar una mezcla de sal con agua fría, en ella dejarás reposar las rodajas por al menos 5 o 10 minutos. Cuando haya pasado el tiempo podrás sacarlas y añadirlas a tu comida. Un punto negativo de este método casero es que el vegetal también perderá su sabor salado.
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En caso de querer evitar eso, prueba esta alternativa: sumerge la cebolla en vinagre de manzana durante 5 a 10 minutos. Con esto no solo conseguirás quitarle lo picoso, sino que también quedará curtida y con un sabor más ameno para tus alimentos.
¿Cómo darles un sabor dulce a las cebollas?
Si deseas preparar un platillo dulce que contenga cebolla, pero no quieres que el vegetal afecte su sabor, te decimos que puedes endulzar el vegetal. Para ello habrá que sumergirla durante unos minutos en leche y ya después agregarla a tu platillo, de esta forma tendrán un sabor agradable y no se les quitarán lo crujiente.
J.R