Aún cuando el secretario de Seguridad Ciudadana del estado, Iovan Elías Pérez Hernández, afirmó que ya tienen listo el operativo de seguridad que se implementará durante el partido de futbol entre Gallos Blancos y Juárez, donde la afición queretana regresará al estadio Corregidora, a lo largo de la semana, se mantuvo la polémica sobre si está garantizada la integridad de los asistentes.
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El titular de la Sscqro no reveló el total de los elementos que participarán en este dispositivo pero sí dijo que estará integrado por la Policía Estatal (PoEs), policías municipales y empresas de seguridad privada; y confió que han cumplido con los requisitos para la reapertura del recinto, que solicitó la Liga MX.
En la semana se difundió información donde señalan que de las tres empresas de seguridad privada que resguardarán el inmueble, sólo una tiene registro ante la Unión de Empresas de Seguridad Privada del Estado de Querétaro.
La incertidumbre creció luego de que aficionados hicieron público que estas empresas, apenas estaban reclutando al personal a través de redes sociales.
Según Mario Aguilar Becerril, presidente de esta Unión de Empresas de Seguridad Privada en la entidad, para dar el servicio de vigilancia en el estadio Corregidora, se necesitan en promedio 400 elementos, bien preparados y capacitados.
A decir de Aguilar Becerril ningún corporativo de seguridad privado, en el estado, cuenta con ese total de elementos y por ello es necesario que participen dos o tres diferentes.
A decir del propio líder gremial la única empresa que ha probado capacidad en el resguardo de este tipo de eventos es Corporativo Speal Querétaro y las demás, aseguró: es su responsabilidad que el personal esté debidamente capacitado y registrado.
En días pasados el gobernador de Querétaro, Mauricio Kuri, resaltó que para el encuentro de futbol adoptaron un nuevo esquema de seguridad que incluye el Fan ID, circuito cerrado de videovigilancia y el fortalecimiento de la plantilla al interior del inmueble, para que nunca se vuelva a repetir un incidente de violencia como el del 5 de Marzo de 2022, en el que aficionados de Gallos Blancos y Atlas se enfrentaron a golpes, con un saldo de 26 heridos y 72 detenidos; además del veto del estadio por un año.