En la zona urbana de la capital de Querétaro el principal problema ambiental es el ruido, según datos de la Secretaría de Desarrollo Sostenible (Sedeso) del municipio, dependencia encargada de dar seguimiento a este tema.
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Se trata de una problemática que genera molestias a los ciudadanos que habitan principalmente el Centro Histórico, pues padecen ruidos durante la madrugada.
A causa de esta situación, la Sedeso estableció un sistema para contener las afectaciones, cuyo modelo fue consultado con el Centro Nacional de Metrología (Cenam).
El sistema considera la NOM-081 que establece que los decibelios (dB) permitidos son de 65dB de las 22:00 a las 06:00 horas, así como de 68dB de las 06:00 a 22:00 horas. Los ruidos que rebasan los niveles permitidos son provocados generalmente por música que se emite desde zonas con grandes aglomeraciones, tales como antros, bares, conciertos o festivales, y que tienen cercanía con viviendas o áreas de descanso.
De ahí la necesidad de establecer en la ciudad de Querétaro un Comité Ciudadano de Control de Ruido del Centro Histórico que, en conjunto con las autoridades realizan operativos, regulaciones voluntarias, vigilancia social participativa, entre otras acciones para mitigar el problema de la contaminación auditiva.
Derivado de estos operativos, en 2022 se han levantado seis sanciones a establecimientos por no respetar la regulación de los decibeles, por lo que fueron acreedores a una multa económica.
A pesar de estos esfuerzos, hay zonas que siguen reportando molestias por el ruido, principalmente en la calle de 5 de Mayo, desde avenida Luis Pasteur hasta la calle Damián Carmona, así como la zona aledaña a Plaza Fundadores en el Barrio de La Cruz, que en conjunto abarcan aproximadamente siete cuadras.
Aunque esta problemática es recurrente en el Centro Histórico, debido a festivales, eventos y celebración públicas, el Festival Querétaro Experimental (que se efectuó de abril a agosto) aumentó la inconformidad de los vecinos, principalmente de la Plaza Fundadores, debido a lo prolongado del evento.
En entrevista para Vía.Tres, Gabriel Corona, presidente del Comité del Barrio de La Cruz, comentó que la contaminación auditiva se refleja en las vibraciones de los cristales a causa del elevado ruido, ya sea por gritos o por aglomeraciones, así como la música con volumen alto en diferentes momentos del día.
“Durante cinco meses estuvimos aguantando ruidos de música, de gritos, de aglomeraciones, prueba de sonidos cada sábado, empezaban desde las 06:00 de la mañana con montajes, luego con pruebas de sonido entre 10:00 de la mañana y 02:00 de la tarde y a partir de las 07:00 de la noche hasta las 02:00 de la mañana era el ruido de una música muy alta y los gritos de las aglomeraciones”, explicó.
El presidente del Comité del Barrio de la Cruz agregó que la contaminación auditiva ha afectado tanto física como psicológicamente a los vecinos de Plaza Fundadores, pues la mayoría de los habitantes de ahí son adultos mayores, por lo que soportar ruidos de esta intensidad, y sin ningún previo aviso, se vuelve un martirio.
“Muchas veces ni siquiera nos avisan que habrá una fiesta o algún evento, hasta que vemos que están armando algo en la plaza es cuando empezamos a prepararnos. Es muy molesto porque la gente que vive en esta zona es adulta y mayor, estar aguantando los ruidos nos daña tanto físicamente como psicológicamente porque se vuelve insoportable el ruido”, dijo Gabriel Corona.
A causa de las molestias que generó el Festival Querétaro Experimental, Gabriel Corona explicó que buscará reuniones con las Secretarías de Turismo y de Cultura para prevenir afectaciones.
“El Querétaro Experimental fue un desorden bien hecho, por lo que queremos ir con las autoridades y ver qué se puede hacer en el estire y afloje, porque de verdad es una situación que no queremos que se repita, imagínate vivir cinco meses con ruidos fuertes y no gustosos a fuera de tu casa”, concluyó.
Sin embargo, en la zona de establecimientos nocturnos, en la calle 5 de Mayo, también se han registrado inquietudes. Juan Ignacio Méndez, vecino en esta área, comentó que ha tenido acercamiento con los locatarios y con las mismas autoridades, sin embargo, muchas veces es ignorado.
“Hay antros que sí respetan, pero otros no lo hacen, hay veces que incluso los restaurantes ponen afuera música en vivo, eso genera que el sonido se expanda más por la avenida. He ido a reportar, a veces sí me hacen caso, en otras ocasiones tengo que ir en grupo para que nos auxilien, pero generalmente el ruido prevalece”, dijo.
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