Elementos de la policía municipal y de la estatal así como del Ejército Mexicano reforzaron la seguridad en los módulos de vacunación contra el Covid-19 para niños de cinco a 11 años de edad, un día después de los hechos registrados en el Centro de Salud Urbano Francisco I. Madero en donde hubo una balacera con saldo de cuatro lesionados.
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Este miércoles se observaron patrullas realizando rondines al igual que policías caminando por parques y alrededores de las instalaciones de los centros de salud en donde se aplica la dosis como en la Junta Auxiliar de La Libertad, en Romero Vargas, el Hospital del Niño Poblano y el Centro Expositor de los Fuertes, además del Hospital del Sur.
En entrevista con algunos asistentes consideraron que es bueno que haya patrullas y policías en estos lugares para evitar desorden.
Afirmaron que fue una buena medida la asumida por el gobernador Miguel Barbosa, el despegar fuerzas policiales porque hay miedo al acudir a vacunar a sus pequeños.
Esto, después de que este martes se registrara un ataque directo en contra de un sujeto que se encontraba en el centro de vacunación de la colonia Francisco I. Madero, y eso causó que los asistentes se tiran al piso para protegerse y poner a salvó a sus hijos.
Después se dio a conocer que dos sujetos a bordo de una motocicleta, dispararon en contra de un presunto delincuente, y las balas alcanzaron a dos niños y un adulto.