El secretario de Salud, José Antonio Martínez García, informó que un menor de 10 años de edad falleció tras la explosión en el taller de fuegos pirotécnicos en Tulcingo del Valle, por lo que el número de víctimas fatales se elevó a ocho.
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El día de ayer explotaron dos polvorines en Tulcingo del Valle y en Santo Tomás Hueyotlipan, con saldo inicial de siete muertos y varios heridos.
Sobre el incidente en Tulcingo del Valle, el funcionario estatal comentó que otro menor de 9 años se encuentra en el Hospital para el Niño Poblano, mientras que un adulto de 33 años permanece en el Hospital de Traumatología y Ortopedia del sector salud.
Del polvorín en Santo Tomas Hueyotlipan, un joven de 23 años con el 90% de la superficie corporal quemada, también perdió la vida.
Al respecto, el gobernador Miguel Barbosa Huerta pidió a los alcaldes estar pendientes de sus municipios y denunciar sitios donde se maneje pólvora de forma clandestina.
En su habitual videoconferencia de prensa señaló que no es posible que se sigan registrando este tipo de hechos y aseveró que estos lugares deben ser reportados ante la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena).
"Para prevenir este tipo de tragedias, les pido a los ediles que denuncien los talleres que están operando de forma clandestina ", destacó.
Ante esta situación comentó que se deben tomar cartas en el asunto y refirió que su administración tendrá revisiones en diversas zonas para detectar estos lugares que funcionan sin los permisos correspondientes.