El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, abrió esta mañana un nuevo frente de conflicto, esta vez con los legisladores republicanos de Estados Unidos.
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Luego de que los congresistas de ese partido, Lindsey Graham y John Neely Kennedy, anunciaron un proyecto de ley que promueve declarar a los cárteles del narcotráfico en México como organizaciones terroristas extranjeras, AMLO lanzó una advertencia ante la intención y posibilidad de intervenir en México (de acuerdo con la propuesta):
“De una vez fijamos postura, nosotros no vamos a permitir que intervenga ningún gobierno extranjero y mucho menos que intervengan fuerzas armadas en nuestro territorio”
Andrés Manuel López Obrador, presidente de México
“Y desde hoy vamos a iniciar una campaña de información a los mexicanos que viven y trabajan en Estados Unidos para informarles de lo que estamos haciendo en México y cómo esta iniciativa de los Republicano, además de irresponsable, es una ofensa a los mexicanos, una falta de respeto a nuestra independencia y soberanía", añadió.
Fue más allá al decir, que “si no cambia su actitud y piensan que van a utilizar a México para sus propósitos propagandísticos, electoreros, politiqueros, nosotros vamos a llamar a que no se vote por ese partido por intervencionista, inhumanos , hipócrita y corrupto. Lo que dijo este senador no lo admitimos, a México se le respeta”, remató.
Los republicanos Lindsey Graham y John Neely Kennedy aseguraron que la intención no es invadir a México, sino para destruir los laboratorios y redes del narco y evitar que con ello lleguen las drogas a los consumidores de Estados Unidos, donde las drogas son una epidemia.