Este martes, mientras realizaba reuniones en Seúl, la subsecretaria de Estado, de los Estados Unidos, Wendy Sherman, advirtió al régimen de Kim Jong-Un, con responder de una manera “rápida y contundente” en caso de que Corea del Norte lleve a cabo una prueba nuclear que ha preparado por meses.
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Funcionarios de EU y Corea del Sur han dicho que Corea del Norte está casi listo para realizar otra detonación nuclear en su campo de pruebas en la ciudad de Punggye-ri. En septiembre del 2017 este lugar albergó la última prueba de una bomba termonuclear surcoreana.
La administración de Biden advirtió que buscará agregar sanciones económicas e internacionales a Corea del Norte en caso de que realicen la prueba. Sin embargo, el impacto de esas medidas continúa sin ser claro, ya que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas se encuentra ocupado y dividido por la invasión rusa a Ucrania.
Después de su reunión con el viceministro de relaciones exteriores de Corea del Sur, Cho Hyun-Dong, Wendy Sherman, se acercó a los medios para dar su opinión sobre la situación:
“Cualquier prueba nuclear sería una violación de las resoluciones acordadas por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Habrá una respuesta rápida y contundente a esa prueba. Continuamos pidiéndole a Pyongyang que pare sus actividades desestabilizadoras y provocativas y escoja el camino de la diplomacia”.
Sherman y Cho planean reunirse este miércoles con su homólogo japonés, Mori Takeo, para continuar con las pláticas sobre la situación. El viaje de Sherman a Asia llega después de que Corea del Norte lanzara ocho misiles balísticos al mar, el domingo de la semana anterior.