Salvador Ramos, de 18 años, fue identificado como el tirador solitario que atacó en una primaria de Texas, pero su historia personal apenas se va descrubriendo, y por lo pronto se sabe que el asesino de 19 niños y dos maestros en Uvalde era un estudiante retraído, con pocos amigos y habría sufrido bullying por ser tartamudo.
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De acuerdo con las inverstigaciones habría comprado legalmente dos rifles de asalto y decenas de municiones la semana pasada para su cumpleaños número 18 y había enviado mensajes sobre sus inteciones de atacar a una adolescente que conoció en línea
Ramos era adolescente acosado, sin antecedentes penales y, como tantos otros atacantes de tiroteos masivos en Estados Unidos, estaba interesado y tenía acceso a armas de fuego y municiones de alto poder.
Las acciones del sospechoso que condujeron al tiroteo ofrecen pistas sobre su forma de pensar y su plan. Ramos compró legalmente dos rifles tipo AR a un licenciatario federal de armas de fuego local el 17 y el 20 de mayo, según el senador del estado de Texas, John Whitmire, quien recibió un reporte de la policía el martes por la noche. También compró 375 rondas de municiones,
El senador estatal Ronald Gutiérrez, quien representa a Uvalde, dijo que las compras se realizaron para el cumpleaños número 18 del sospechoso, datos que también fueron confirmados por la policía.