La corte de Moscú ordenó a Google pagar una multa de 11 millones de rublos, que equivalen a 134,500 dólares, por materiales expuestos en la plataforma de YouTube.
Te podría interesar
Adicionalmente, el juez Timur Vakhrameyev, del distrito de Taganka, en la capital rusa, dictaminó el 21 de abril que Google debe pagar una multa de 4 millones de rublos, equivalente a 50 mil dólares, por no eliminar lo que las autoridades habían considerado anteriormente como “contenido prohibido”.
En un caso separado, el mismo juez determinó que la empresa debía pagar 7 millones de rublos, equivalente a 87 mil dólares, por distribuir materiales producidos por el grupo militar ucraniano “Azov” y el grupo ucraniano de extrema derecha “Right Sector”.
Los fallos de la corte se producen dos semanas después de que el regulador de medios ruso, “Roskomnadzor” acusara a Google de violar la ley, diciendo que su plataforma, YouTube, "se convirtió en una de las plataformas clave para difundir "noticias falsas" sobre la guerra que Moscú inició contra Ucrania. Así mismo, amenazaron al gigante tecnológico de prohibir la publicidad en la plataforma.
Días después de que Rusia lanzara su invasión a Ucrania el 24 de febrero, Roskomnadzor ordenó a los medios de comunicación de todo el país que publicaran información sobre la invasión militar, únicamente si la proporcionaban fuentes oficiales.
El 4 de marzo, Roskomnadzor bloqueó Facebook, alegando que la plataforma de redes sociales más grande del mundo estaba discriminando a los medios y recursos de información rusos como RT, RIA Novosti y Sputnik. Un día después, el presidente Vladimir Putin firmó una ley que dicta largas penas de prisión por distribuir "información deliberadamente falsa" sobre las operaciones militares rusas.
Algunos periodistas rusos han abandonado Rusia después de que sus empresas tuvieran que parar o suspender operaciones tras la criminalización de la cobertura de la guerra en Ucrania. Desde entonces, varios han iniciado sus propias transmisiones en YouTube para cubrir y discutir la guerra en curso.
El control de Putin sobre los medios de comunicación, redes sociales e interacción en línea sigue fortaleciéndose firmemente. Por su parte, Google no ha liberado un comunicado con respecto a los fallos de la corte rusa.