El piloto mexicano Sergio 'Checo' Pérez conquistó el segundo lugar en Gran Bretaña, sumando puntos muy valiosos en la lucha por el Campeonato Mundial de Pilotos.
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Con este segundo lugar, "Checo" se mantiene solo por detrás de Max Verstappen con 147 puntos, mientras que el monegasco Charles Leclerc permanece tercero nueve unidades abajo del azteca.
El Gran Premio de Silverstone comenzó en un caos absoluto. Un accidente en la primera curva que involucró a cinco autos terminó con una bandera roja y tres retiros de monoplazas.
El accidente fue tan severo, que los pilotos, Guanyu Zhou y Alex Albon, tuvieron que ser traslados al hospital. El auto del chino incluso quedó atrapado entre las barreras de seguridad y la cerca que protege al público.
Hubo incertidumbre en los pits hasta que se confirmó que ambos pilotos estaban conscientes y bien y en cuestión de horas fueron dados de alta. Como dicta el reglamento, se reinició la carrera con una grilla de partida detenida que colocó a los autos en el mismo orden que la clasificación.
El reinicio presenció una intensa batalla entre los dos pilotos de Ferrari y de Red Bull. Charles Leclerc y "Checo" Pérez tuvieron un contacto que dañó el alerón del monegasco, y obligó al mexicano a entrar a los pits; acción que dejaría al tapatío en el último lugar de la carrera.
Poco a poco, el actual líder del campeonato, Max Verstappen, empezó a pelear por el primer lugar, y por un error de Carlos Sainz, lo consiguió. Sin embargo, en la vuelta 13, el auto del holandés se daño por restos de fibra de carbono en la pista. Inmediatamente perdió el liderato y su ritmo de carrera, por lo que no terminó en el podio. No obstante, sí minimizó el daño al terminar en séptimo con un auto extremadamente dañado.
Gran parte de la carrera se definió por la pelea en la punta entre ambos pilotos de Ferrari, ya que, a pesar del daño en su alerón, Leclerc superó a su compañero y lideró la mayor parte de la carrera. El Mercedes de Hamilton se dedicó a cazar al equipo italiano, mientras “Checo” Pérez subía constantemente en las posiciones.
El destino parecía sellado, pero en la vuelta 31, el francés, Estaban Ocon, perdió el poder de su motor, por lo que fue necesario un safety car. Rápidamente, la mayoría de la parrilla entró a los pits por un neumático blando, dejando al líder de la carrera, Leclerc, desprotegido en la punta con un neumáticos duros.
Cuando reinició la carrera por segunda vez, el español, Carlos Sainz, aprovechó para apoderarse de la primera posición. Para este punto, “Checo” se encontraba en cuarto lugar, después de una gran recuperación.
Las últimas vueltas presenciaron una épica batalla entre Leclerc, Hamilton y Pérez, cuando el monegasco terminó en cuarta posición por su desventaja de neumáticos.
Por un momento, parecería que el mexicano tendría que conformarse con el tercer lugar, pero después de una gran defensa y un mejor ataque, el piloto Red Bull aseguró la segunda posición en el podio.
No es la primera vez que “Checho” consigue recuperarse desde el fondo, e inclusive fue nombrado el piloto del día.