Nadie, absolutamente nadie, se sorprendió con la elección de Javier Rascado Pérez como nuevo titular de la Defensoría de Derechos Humanos del Querétaro para el periodo 2022-2027; pues, como adelantamos en este espacio, era el candidato favorito de Palacio de Gobierno.
Lo que sí levantó varias cejas fue que algunos candidatos y representantes de organizaciones civiles terminaron muy molestos y hasta dando portazos luego de la sesión del Pleno en la que los diputados votaron al nuevo ombudsperson, esto tras acusar una simulación en el proceso de elección.
También tomó a muchos por sorpresa que una de las integrantes de la terna final, Maricruz Ocampo, adelantara que pedirá la creación de una ley para evitar favoritismos en próximos procesos de selección para ese encargo, y que la votación se haga de manera abierta. En resumen, una de esas propuestas de ley que, por supuesto, no gustan a ningún poder.