El proyecto municipal de gentrificación “Barrios Mágicos”, que busca convertir en zonas turísticas algunas colonias tradicionales del municipio de Querétaro, ha elevado los costos de las rentas y servicios públicos para sus residentes; por lo que estos se han visto obligados a mudarse a zonas más económicas de la ciudad.
Dante Irrea Gamboa, uno de los afectados por tener que mudarse del barrio del Tepetate, dijo a Vía.Tres que las autoridades municipales no tienen derecho a desplazarlos y tampoco a sacar provecho de los barrios de la localidad.
“Yo me sentí despojado del barrio cuando aumentó un 50% mi renta, una cosa es que quieran ayudar a la infraestructura de los barrios y la otra es volverlo un lugar turístico”, indicó.
Como parte del programa de transformación municipal, en el barrio del Tepetate la administración de Luis Bernardo Nava ha concretado una inversión de cuatro millones 580 mil 498 pesos, para remodelar cinco calles del Centro Histórico.
Pero, de acuerdo con el urbanista Gerardo García Vázquez, el proyecto no tomó en cuenta a los residentes originales de esas zonas; pues arreglar los barrios buscando la gentrificación con espacios modernos y turísticos tuvo como consecuencia un encarecimiento de su nivel de vida.
“De por sí la pandemia y la inflación han golpeado al comercio del Tepetate; el aumentar los costos, por darle prioridad al turismo, no sería lo más conveniente. Las tienditas de la esquina en competencia con abarrotes de franquicia o cafeterías carísimas afectan tanto al comerciante como al comprador, porque los precios van al alza”, dijo.
“¿A dónde va a vivir la gente que no pueda pagar la renta del lugar? Los desplazarán a las colonias de vivienda social a los alrededores de la ciudad y, para transportarse de allá hacía el Centro Histórico, ¿cuánto tardarán? Los desplazamientos serían inevitables con la gentrificación” indicó Gerardo García Vázquez, urbanista.
A mediados del presente año, la secretaria de Obras Públicas del Municipio de Querétaro, Oriana López Castillo, dijo que se destinarían 90 millones de pesos para terminar los trabajos del programa de Barrios Mágicos, propuesto por Luis Bernardo Nava durante su candidatura; esto para generar un “rescate urbano” de las zonas del Tepetate, Hércules, Santa María Magdalena y Santa Rosa Jáuregui.
Según Dante Irrea Gamboa, los cambios urbanos han beneficiado más a la clase privilegiada y al turismo, pero no a la gente del barrio.
“El hecho de que se construyan plazas, centros comerciales o que lleguen franquicias no ayuda a los comerciantes, al contrario, son afectadas las relaciones comunitarias y económicas. Hay actividad comercial fija que es dirigida la clase obrera y trabajadora, pero planteas modificar las dinámicas del barrio para tu beneficio sin pensar en la gente que habita en él”, reclamó el vecino desplazado.
La gentrificación de colonias y barrios céntricos en las grandes ciudades de América Latina sólo beneficia a los desarrolladores inmobiliarios, a los empresarios y al turismo, afirmó Luis Alberto Salinas, investigador del Instituto de Geografía (IGg) de la UNAM.
Este proceso, explicó el especialista, “es la reestructuración de clase y de relaciones sociales en un espacio urbano determinado. Se caracteriza, principalmente, por el desplazamiento de una población de menores recursos por otra con mayores ingresos”.