En Puebla no se han podido recuperar dos mil de los seis mil empleos que se perdieron en los dos años de la pandemia por Covid-19, así lo reconoció el presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico, José Juan Ayala.
El empresario comentó que la actividad comercial de este año no es la misma previo a la emergencia sanitaria, pues ahora las ventas están entre el 50% y el 65%, es decir, los clientes ahora compran en menor cantidad.
"La gente está comprando el 50% menos que hace dos años y el año pasado de mil pesos de consumo por persona ahora son sólo 500 pesos”, precisó.
Comentó que de las 10 mil unidades económicas que hay en el centro de la ciudad, al menos mil cerraron y no han podido reabrir; en tanto, el 5% de los comercios existentes, entre zapaterías, cafeterías, tiendas de ropa y hasta pequeños hoteles, contrataron algún crédito para hacer frente a la situación económica.
Ayala destacó que la renta de los locales es otro problema al que se enfrentan, pues actualmente el pago por este concepto va de los siete mil hasta los 300 mil pesos, esta última cantidad por un inmueble en el primer cuadro de la ciudad.
Ahora con miras al cierre del año, los representantes del sector comercial esperan que las ventas aumenten 15%, y después de dos años, podrán contratar un 15% de personal eventual, sobre todo en negocios de ropa, electrónica, zapaterías y artículos varios.
En contraste, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco), Marco Antonio Prósperi Calderón, consideró que las actuales condiciones económicas son mejores que en los dos años anteriores, por lo que son altas las posibilidades de recuperar empleos.
“Esperamos que al cierre de este año las ventas aumenten entre un 10 a un 15%, creo que podemos cumplir con las expectativas, pues en los meses de noviembre y diciembre son de los de mayor flujo comercial, ya después vendrá la cuesta de enero”, comentó el empresario.
Actualmente, el sector comercial es libre de manejar su aforo; sin embargo, existe el compromiso de mantener una fluencia del 80% para garantizar la sana distancia, con el fin de cuidar la salud de clientes y trabajadores.