El estado de Puebla reflejó una tasa de desocupación laboral del 3.6% durante diciembre de 2021 que, comparada con el mismo mes del año anterior, representa una ligera recuperación, pues el porcentaje de desocupación era de 4.5% en 2020.
Así lo reveló la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), a través de cifras que reflejan que la tasa de desocupación mensual promedio fue del 3.9% durante el año anterior( es decir, menor al registro nacional que fue de 4.1%.
El número de personas que durante diciembre de 2021 se encontraron sin empleo fue de 107 mil 990, respecto a las casi 3 millones de personas que se ubican dentro del estatus de Población Económicamente Activa en Puebla.
A nivel nacional, los sitios que reflejaron las mayores tasas de personas desocupadas laboralmente en el mes de diciembre fueron Ciudad de México con el 6.3%, seguido de Coahuila con el 5.5%, Estado de México 4.9%, Querétaro 4.6% y Tabasco con 4.5%, por mencionar algunos.
El INEGI detalló que en todo el país hay 59 millones de personas económicamente activas, lo que implica una tasa de participación del 59.5%; esa población es superior en 4.3 millones con relación a diciembre de 2020.
Puebla capital con menor ocupación laboral
Pese a lo anterior, el INEGI da cuenta de que, a nivel municipal, la ciudad de Puebla es la cuarta en todo el país con la mayor tasa de desocupación laboral; al menos hasta el tercer trimestre de 2021, cuando fue publicado el último reporte desglosado por municipio.
De 39 ciudades estudiadas, Puebla capital concentró una tasa de personas sin empleo del 6.5%, la mayor cifra sólo después de Ciudad de México, Villahermosa y Querétaro.
Por otro lado, la ciudad se ubicó en el décimo tercer peldaño en cuanto a la tasa de subutilización de la fuerza de trabajo, en el octavo lugar con la mayor tasa de informalidad laboral y en el décimo segundo de ocupación del sector informal.
Alta tasa de empleo igual a informalidad laboral
Al respecto, Diana Campos, profesora e investigadora de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP) reconoció que la alta tasa de ocupación laboral en el estado se debe a la reactivación económica tras los meses de confinamiento por la pandemia de Covid-19.
Sin embargo, argumentó que el incremento en la tasa de ocupación no necesariamente es un aspecto positivo en cuanto a la creación de empleos, sino que es un reflejo de que cada vez más personas se han sumado a la actividad comercial informal.
Sostuvo que en los casos donde la población se ha adherido a la población económicamente activa mediante empleos formales, en muchas ocasiones viven en condiciones de precariedad: trabajos mal remunerados, sin seguridad social o prestaciones, sin contratos formales, además de excesiva carga de trabajo u horarios extensos.
“Tenemos que gran parte de la población económicamente activa se integra mediante empleos informales, de ahí el incremento en la tasa de ocupación, sin embargo, la realidad es que muchas personas aceptan empleos mal remunerados por diversos aspectos como tener que mantener una familia, salir de deudas o diversos factores, pero siguen viviendo condiciones de precariedad, en infinitos casos sin prestaciones primarias o secundarias”
Diana Campos, académica