Viernes 12 de Enero de  2024
A 4 AÑOS DE DISTANCIA

Casi restaurada, la imagen de Santiago Apóstol afectada por el sismo de 2017

Su reparación estuvo dividida en cuatro etapas; la cabalgadura tendrá una réplica pues no se pudo recuperar la original

Créditos: Cortesía
Escrito en PUEBLA el

Cuatro años tuvieron que pasar para que la escultura del apóstol Santiago de Izúcar de Matamoros en Puebla esté a punto de ser restablecida en su totalidad, luego de resultar severamente afectada con la caída de la cúpula de su parroquia durante el sismo del 19 de septiembre de 2017.

Tras el temblor tuvo que ser trasladada al Laboratorio de Conservación de Escultura Policromada, ubicado en la Ciudad de México, donde se inició con el análisis para su recuperación. 

La pieza que data del siglo XVII e inicios del XVIII, y que mide más de 2.5 metros de altura, se encuentra en la etapa final de restauración; los expertos reconocen que tuvo daños irreparables en su materialidad, es decir la madera tallada y policromada. 

Ahora tendrá una réplica de su cabalgadura, la cual más tarde será ejecutada por talladores expertos, pues es imposible restablecer la original. 

De acuerdo con Roxana Romero Castro, quien es restauradora perito del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), “tras el movimiento sísmico, representó una oportunidad única para diseccionar su técnica de manufactura, mostrando una estratigrafía que comprende, primeramente, un tubo de papel amate, seguido de cañuelas de maíz alineadas, pasta de maíz, entelados de lino y, finalmente, una base de preparación sobre la que recae la policromía". 

Es de mencionar que la intervención estuvo dividida en cuatro etapas, entre las que destaca una investigación que abarcó aspectos históricos, el registro y la estabilización del material correspondiente. 

“Es un caso paradigmático visto desde distintos ángulos, empezando por el conocimiento de su técnica de manufactura y de sus deterioros, hasta la definición del proyecto de intervención y la ejecución de las tareas de restauración. Esperamos que la gente de Izúcar, que también ha sido partícipe, pueda apreciar todo este esfuerzo y nos ayude a conservar su santo patrono por mucho más tiempo”

Roxana Romero Castro, restauradora perito del INAH