Entre volcanes

Una buena para el Auditor Superior del Estado, Francisco Romero Serrano, pues con las fechas navideñas y el amor que emana de los hombres y mujeres de buena voluntad, su esposa ya dio su brazo a torcer y le entregó el perdón; por lo que, aseguran, se desiste de la denuncia por violencia intrafamiliar que llevaría a la cárcel al funcionario, básicamente por la “corretiza” que según diversos testigos le dio a su pareja en un visible estado de ebriedad.
 
La mala para Romero Serrano es que el gobernador Luis Miguel Barbosa le resultó más rencoroso que esposo o esposa despechada, y al parecer éste no se detendrá en el intento de que el estado de Puebla inicié el año 2022 con un nuevo auditor; de preferencia, una mujer u hombre honrado, y de perdida que, a diferencia del actual, no se ponga a hacer negocios con personajes indeseables de la oposición.