México cuenta con uno de los ecosistemas más variados en todo el mundo, por ello es importante conocer los tipos de clima que predominan durante lo largo del año para poder estar preparado ante cualquier adversidad.
Te podría interesar
En el caso de las temporadas de lluvias, es de suma importancia estar informado sobre la fecha en que comienzan, debido a que hay muchas comunidades que habitan cerca de ríos u arroyos y las precipitaciones fuertes podrían provocar deslaves e inundaciones. Por lo anterior, tener conocimiento sobre la temporada de lluvias ayudará a estar prevenidos ante estas circunstancias y evitar alguna tragedia.
De acuerdo con la Comisión Nacional del Agua (Conagua), la época donde se produce la mayor cantidad de precipitaciones en México ocurre entre los meses de abril y noviembre. Como tal, no existe una fecha exacta en la que se declaré el inicio de la temporada de lluvias, pero a partir de la segunda semana de mayo empiezan las precipitaciones con regularidad, debido a que el 15 de mayo inicia la temporada de huracanes en la cuenca del Pacífico nororiental.
Además, la temporada de huracanes da comienzo el 1 de junio en el Atlántico, por lo que en ese mes es cuando se establecen de manera definitiva las precipitaciones. Los meses con más registro de caída de agua son de julio a octubre y se espera que tras el 30 de noviembre la temporada de lluvias llegue a su final.
Recomendaciones para la temporada de lluvias
El Gobierno de México invitó a los ciudadanos que viven cerca de presas, ríos y mares a estar prevenidos antes, durante y después de la temporada de lluvias. Para evitar daños por inundaciones dio las siguientes recomendaciones:
- Evita transitar en zonas inundadas porque el agua puede arrastrar incluso vehículos.
- No camines en zonas inundadas porque puede haber cables con energía eléctrica bajo el agua.
- Evita cruzar ríos, arroyos, vados y zonas bajas porque puedes ser arrastrado por el agua.
- No cruces puentes si el agua pasa por encima de ellos.
- Reporta las coladeras que estén tapadas y mantenlas limpias.
- Coloca costales rellenos de arena para evitar que el agua entre a tu casa.
- Retira los objetos de tu casa que puedan ser arrastrados por el agua.
- En caso de inundación corta la corriente eléctrica y desaloja el espacio susceptible a inundarse.