Derivado de la contaminación generada por la contaminación de la Central Termoeléctrica Francisco Pérez Ríos, ubicada en Tula, Hidalgo, la cual podría impactar en problemas respiratorios en la población, el Consejo Nacional de Litigio Estratégico interpuso un amparo para que dichas instalaciones cumplan con sus obligaciones en materia ambiental.
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La organización recordó que el 31 de diciembre de 2015 la Termoeléctrica Francisco Pérez Ríos recibió el permiso de la CRE para la generación de electricidad. En éste se estableció que la Central haría uso de gas natural como combustible primario, pero no se hace mención del uso de combustóleo.
Sin embargo, en 2018, la Unidad de Electricidad de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) avaló el uso de combustóleo en dicha Central, generando la concentración de azufre de entre 3.90% y 4.05% cuando lo permitido -de acuerdo con la NOM-016- es de 2%.
De esta manera, el Consejo Nacional de Litigio Estratégico señaló que esta Central operada por la Comisión Federal de Electricidad (CFE), ha operado en desacato durante años, dejando de lado sus obligaciones con el medio ambiente.
Entre sus consideraciones, el Consejo detalló que esta contaminación “afecta a la población que vive en la zona, incluyendo al del Estado de México y la Ciudad de México, ya que se viola su derecho a la salud y a un medio ambiente sano. Lo anterior porque se ha probado que la dispersión de contaminantes llega a afectar la calidad de aire de toda la Zona Metropolitana del Valle de México”.
Según el Consejo Nacional de Litigio Estratégico “hay estudios que atribuyen entre el 18% y el 27% del Dióxido de Azufre en la Ciudad de México a la quema de combustóleo en la Central de Tula.
La Central Termoeléctrica “Francisco Pérez Ríos”, es una de las principales fuentes de generación de energía eléctrica para la Ciudad de México.
En abril de 2021, la CFE aseguró que opera con una reducción del 80% de combustóleo respecto a su máxima capacidad de generación.
“La CFE mantiene el compromiso con la CAMe y el resto de las autoridades ambientales en pro de la calidad del aire en la Zona Metropolitana del Valle de México, por lo que cumple con la medida establecida en la Gaceta Oficial de la Ciudad de México, fechada el 28 de mayo de 2019, donde solicita una reducción del 30% del consumo de combustóleo en la termoeléctrica”, explicó.
Agregó que la Central Tula, emplea para la generación de energía eléctrica combustóleo, gas natural o una mezcla de estos dos combustibles y suministra el 20% de la demanda diaria del Área Metropolitana del Valle de México.
A este recurso legal se suman dos demandas interpuestas por Movimiento Ciudadano ante la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa); una correspondiente a mayo de 2022 y a segunda a febrero de este año, al considerar que esta Termoeléctrica emite altos niveles de contaminación a la Ciudad de México.