Jueves 18 de Enero de  2024
SOBREVIVIENTE DE FEMINICIDIO

Liliana Torres, quemada viva y víctima de abuso, lucha por justicia tras intento de feminicidio

Liliana vive casi postrada en cama luego de tener dos terceras partes de su cuerpo quemadas. Ha sido sometida a varias intervenciones y muchas veces ha sido revictimizada por las autoridades

Escrito en NACIONAL el

El 26 de marzo, en Salinas Victoria, Nuevo León, en un terreno baldío una mujer se sacudía las llamas que le abrasaban el cuerpo hasta dejarla inconsciente. Treinta días después, Liliana Torres, la víctima de ese hecho, abrió los ojos, pero no podía hablar. 

Ahora se sabe que cuatro hombres abusaron de ella, le rociaron gasolina y le prendieron fuego. Su caso, en principio fue tratado como accidente, pero hoy está clasificado como tentativa de feminicidio.

“Fue hasta el 28 de junio que en Firma Rosa tomamos el caso, ella no tenía abogado privado; que le hicieron caso, que le dieron al menos la atención como víctima no quiere decir que ya todo esté resuelto, pero va avanzando”, contó para Vía.Tres una de los tres abogados que representa a la joven de 24 años.

Liliana vive casi postrada en cama luego de tener dos terceras partes de su cuerpo quemadas. Ha sido sometida a varias intervenciones, y muchas veces ha sido revictimizada por las propias autoridades.

A decir de su representación legal, al principio nadie le hizo caso, “como quedó afectada física y emocionalmente, estuvo en coma, pues su daño es serio. La quisieron callar en la Fiscalía del estado, en el Instituto de la Mujer y la propia Comisión de Víctimas”.

En esas instancias pusieron en tela de juicio su vida privada, sus cuatro hijos y sus conflictos personales y familiares; la acusaron de haber cambiado la versión varias veces y le dijeron que no había elementos para considerar más que un accidente.

“Si fueran tan profesionales entenderían que cualquier víctima que pasó por una situación así, por ese shock emocional, quemaduras, intento de feminicidio, estaría peor. Lili no tiene claras las fechas y es evidente por el tiempo que estuvo entubada, que fueron cerca de siete días, más dos meses y medio de hospital”, agregó la abogada.

“Después que tomamos el caso empezamos a presionar a la fiscalía para que hicieran correctamente su trabajo, tan es así que tuvieron que ir hasta su casa a hacer la declaración porque ella no se encontraba en condiciones”, señaló una de sus defensoras, que ya ha sido amenazada por los propios agresores, quienes siguen libres.

El pasado viernes 15 de julio se concluyó la primera etapa del caso, es decir, la de la investigación donde se tomó por fin su declaración, se le practicaron los exámenes médicos y psicológicos. “Claro ahí también la revictimizaron, le quisieron sacar que era drogadicta, y si lo fuera eso no impide que haya justicia por su agresión”, reclamó la abogada.

El siguiente paso es que se judicialice esa carpeta, que un juez de control autorice la carpeta de investigación para que se avance y, posteriormente, se giren órdenes de aprehensión contra los responsables.

“Lo que nos tranquiliza es que ya este caso es por tentativa de feminicidio y hay que recalcar que ella es una sobreviviente, gracias a Dios quedó viva para que se haga justicia”, añadió.

La defensa reveló que los presuntos culpables ya se han comunicado con los abogados de Firma Rosa, “reclamando que investiguemos bien, que quieren limpiar su nombre, están mortificados porque el proceso ya avanzó”. 

En este momento Liliana ya no se encuentra en Nuevo León debido a las constantes amenazas de los agresores, por ello la firma está tratando de sacarla del país y pedir asilo en Estados Unidos.

Para la defensora, este caso es uno más en el que se hace sentir culpable a la mujer que denuncia, “la fiscalía una y otra vez las hace culpables, las hostiga, no hay empatía ni tacto a la hora de las declaraciones. Las revuelven, las presionan y por eso las víctimas no quieren seguir con los procesos”.

Liliana ahora hace transmisiones vía Facebook para seguir alzando la voz por su caso y los daños que tiene en su cuerpo. Se gana la vida vendiendo cosas en un mercado y trata de sacar adelante a su familia, en lo que llega para ella la justicia.