Pese a los esfuerzos de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS), las tasas de sindicalización en México siguen a la baja; en el primer trimestre de 2022, el porcentaje de trabajadores que pertenecen a una organización gremial fue de apenas el 12.7%, cifra similar a la de 2015.
Hace unos días, la STPS afirmó que se trata de “las tasas de sindicalización más altas en los últimos siete años”; sin embargo, esto dista de la realidad.
De acuerdo con cálculos de la Comisión Nacional de Salarios Mínimos, (Conasami), el número de trabajadores que pertenecen a un sindicato es de 4 millones 869 mil 45, esto con base en datos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Desde 2005, cuando empezó el levantamiento de la ENOE y hasta 2018, la cifra de trabajadores sindicalizados ha disminuido. El dato más alentador se registró precisamente en 2005 y 2006 cuando se ubicó en 16.8%; mientras que el número más bajo que se tiene registrado es de 2018, que cayó a 12%.
La dependencia resaltó que, a partir de 2019, la caída en la tasa de sindicalizados se detuvo y ha venido creciendo a partir de ese año, lo que atribuyen a la entrada en operación de la Reforma Laboral, pues destacan que entre sus objetivos está “regresar el poder de decisión de las principales actividades de un sindicato a sus trabajadores”, por lo que desde su punto de vista esto abona a mejorar este indicador.
En 2019 el porcentaje de trabajadores que pertenecían a un sindicato se ubicó en 12.4%, cifra similar a la que se registró en el 2020; en 2021 se elevó a 13.1% y en el primer trimestre de 2022 se colocó en 12.7%.
Si se compara el mejor registro de la actual administración, que fue en 2021, cuando se situó en 13.1% contra el dato histórico más elevado, que se dio en 2006 y fue de 16.8%, la caída es de 3.7%.
En semanas anteriores, durante el Foro “El Movimiento Sindical y la Reforma Laboral”, organizado por instituciones académicas y sindicatos, la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, aseguró que “el gran reto sindical es volver atractivo el derecho de asociación entre los trabajadores más jóvenes y entre quienes van incorporándose a la economía, para asegurar el largo plazo y la sostenibilidad de las organizaciones”.
“Venimos de décadas en las que se impulsó una opinión pública un discurso individualista, en el cual se estigmatizó a los sindicatos, a la par en México y en el mundo se sufrió un proceso de desorganización, de fragmentación, de atomización de los trabajadores, que fue conduciendo a muy bajas tasas de sindicalización”, refirió.
En este marco, Alcalde Luján destacó que, bajo el modelo de “sé tu propio jefe, maneja tus propios horarios o conviértete en el socio de tu empresa”, se acentuó la precarización de los derechos laborales como la pérdida de seguridad social, pensiones, vivienda, derecho a contrato, entre otros.
El 1 de mayo de 2019 se publicó el decreto que dio pie a la vigente Reforma Laboral, basada en tres pilares: Nuevo sistema de justicia laboral. Libertad y democracia sindical. Y Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral.