Viernes 12 de Enero de  2024
“AHORRO ES MÍNIMO”, ASEGURA

Ooootra vez AMLO quiere echar abajo el Horario de Verano; daña la salud, dice según estudio de CFE

Depresión y hasta infartos, podrían ser algunas de las repercusiones a la salud por el cambio de horario

Escrito en NACIONAL el

El presidente Andrés Manuel López Obrador adelantó que este 2022 podría ser el último año en el que se aplique el Horario de Verano, al argumentar que “causa daño a la salud y el ahorro económico es mínimo”. Con esta sería la tercera vez que intenta echar abajo la medida que se aplica cada año.

La determinación se dio luego de una “investigación abierta” realizada por la Secretaría de Energía (Sener), la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y la Secretaría de Salud (SSa).

"Es mínimo el ahorro y es considerable el daño a la salud. Hay mucha posibilidad de quitarlo, pero vamos a exponer el por qué, sobre todo, por el daño a la salud. Está probado que se daña la salud, pero que además el ahorro es mínimo"

Andrés Manuel López Obrador

Implementado por primera vez en 1996, por decreto presidencial durante el sexenio de Ernesto Zedillo Ponce de León, el Horario de Verano tenía el propósito de aprovechar la luz natural y reducir los gastos energéticos, además de ampliar la relación comercial y financiera con otros países, a través de una mejor coordinación en los horarios.

Al corte de aquel primer año de aplicación, el Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (FIDE) informó que se habían logrado ahorrar 385 millones de pesos. En cuanto al ahorro de energía se llegó al 0.8% y no al 1%, como lo habían estimado las autoridades federales.

Veintiséis años después, el presidente López Obrador refirió que las estimaciones de ahorro correspondían a mil millones de pesos anuales, por lo que señaló que, de cancelarse el Horario de Verano, se podría implementar un “compromiso de ahorrar, una campaña con ese propósito de ahorrar un poco, apaga dos focos y podemos bajarle”.

El primer mandatario indicó que primero se dará a conocer la investigación y de ahí se decidirá si permanece o no el Horario, pero si el tema está muy dividido se podría llevar a una consulta.

“Si vemos que es mayoritario el apoyo en un sentido o en otro, no hay consulta y lo podemos medir con una encuesta, sin necesidad de consulta”, dijo.

 

El estudio

La Secretaría de Salud dio a conocer el estudio “Repercusiones en la salud por el cambio de horario”, las cuales van desde daños psicoemocionales, sociales, hasta el aumento de infartos.

“Algunos estudios sugieren una asociación entre el horario de verano y el aumento de la ocurrencia de infarto cardíaco, especialmente en la primera semana después de ser implementado. Los posibles mecanismos incluyen la privación del sueño, la desalineación circadiana y las condiciones climáticas. El papel del género y la preferencia individual en los ritmos circadianos necesitan mayor evaluación”, indica el documento.

También refiere que un ritmo biológico más estable mejora el rendimiento intelectual, disminuye el riesgo de enfermedades del corazón, obesidad, insomnio y depresión.

De acuerdo con la investigación, el cambio de horario también afecta el sistema nervioso a través de la somnolencia, irritabilidad, dificultad en la atención, la concentración y la memoria. Se suman también trastornos digestivos, aumento de secreción del jugo gástrico, disminución diurna y aumento nocturno del apetito; trastornos hormonales y malestar general. 

Para Raúl Aguilar Roblero, investigador del Instituto de Fisiología Celular de la UNAM, los estragos de los horarios, ya sea de verano o de invierno, dependen de cada persona, pues todos reaccionamos de diferente forma, de acuerdo con las características propias de cada individuo.

“Esto se debe a que todos los seres vivos tienen un reloj circadiano ubicado en el hipotálamo del cerebro, que se encarga de coordinar a todo el organismo. Este reloj usa dos señales muy importantes para sincronizarse: la luz del Sol y el horario de alimentación”, comentó.

La fórmula, según el especialista, está en saber adaptarse en un lapso de tres a cinco días, para lo cual recomendó “cambiar el horario de alimentación días antes para que el reloj circadiano capte estas señales y le sea más fácil la transición”.

Asimismo, para evitar las afectaciones a la salud, es necesario modificar los horarios de las comidas con antelación; es decir, unos días antes de entrar en vigor el Horario de Verano.

Esta no es la primera vez que el presidente López Obrador manifiesta su intención de quitar el Horario de Verano, pues incluso como candidato a la Presidencia en 2006 se pronunció por llevar el tema a consulta popular.

Así también, en 2001, cuando fue jefe de Gobierno del Distrito Federal, impugnó la medida, realizó una encuesta telefónica y emitió un decreto para que no se aplicara en la capital del país, llegando el caso hasta la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

El jueves 28 de abril la Cámara de Diputados tenía prevista una discusión sobre la eliminación del Horario de Verano, pero de último momento la Junta de Coordinación Política decidió bajar el asunto, lo que provocó que en aquella ocasión el legislador del Partido del Trabajo (PT) Gerardo Fernández Noroña, reclamara a sus compañeros de Morena y advirtió que se trataba de un error. 

En tribuna el legislador afirmó que se trataba de un “clamor popular acabar con ese horario, que no ha traído ningún beneficio”.