De acuerdo con el reporte más reciente de las autoridades fronterizas de Estados Unidos, en marzo fueron detenidos 210 mil migrantes en la frontera con México, lo que se coloca como el número más grande mensual en dos décadas. En las próximas semanas, los migrantes seguirán siendo expulsados de manera inmediata, la mayoría a territorio nacional.
El dato representa además un incremento de 24% con respecto a los números de marzo de 2021, cuando fueron arrestados 169 mil migrantes en la frontera, fenómeno que a su vez dejó a miles de niños no acompañados en estaciones de la patrulla fronteriza, para después ser trasladados a refugios temporales bajo el control del gobierno de Estados Unidos.
Aunque más de la mitad de los migrantes encontrados en la frontera entre Estados Unidos y México en los últimos meses proceden de México, Guatemala, Honduras y El Salvador, es más frecuente en estos días ver a gente intentando llegar a suelo americano provenientes de Ucrania y Rusia, situación provocada por la guerra en esa zona.
Según las previsiones de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), se tiene proyectado que en las próximas semanas arribarán por lo menos 18 mil migrantes al día a los cruces con México.
Las estadísticas de marzo refieren que además del dato récord de los 210 mil migrantes sin documentos, hubo otros 11 mil inmigrantes que pretendieron ingresar por un cruce legal, pero sin tener un visado o permiso válido.
Del total de detenidos, dice la Patrulla Fronteriza, la mitad fue expulsado a sus países de origen o a territorio mexicano en apego a la orden del Título 42, la cual se estableció bajo el gobierno de Donald Trump en 2020, como una orden de salud pública para contener la pandemia del Covid-19.
La mencionada orden permite a los funcionarios fronterizos expulsar a migrantes de forma inmediata; la única excepción son los menores no acompañados.
El pasado 1 de abril, la administración de Joe Biden anunció que se eliminarán las restricciones para pedir asilo en la frontera entre México y Estados Unidos, lo que echa por tierra esa polémica medida del Título 42. Sin embargo, el secretario del Departamento de Seguridad Interna de Estados Unidos (DHS), Alejandro Mayorkas, dijo que será rescindida el 23 de mayo y, hasta que llegue esa fecha, continuarán las expulsiones de adultos y familias.
Al mismo tiempo, Mayorkas reveló la semana pasada que, como parte de los preparativos, el DHS creó en sus oficinas sede un Centro de Coordinación de la Frontera Suroeste para alinear las políticas con las distintas agencias que tratan con migrantes.
Entre las medidas que se implementarán para hacer frente al aumento migratorio, el DHS informó que se contempla contratar más personal y voluntarios que ayuden a procesar los casos de manera más eficiente.
El presidente demócrata Joe Biden se ha comprometido a suavizar las medidas migratorias o a revertir algunas de las políticas en la materia que emitió Trump, pero se enfrenta a una gran oposición de parte de los republicanos.
El Partido Republicano, que busca tener el control del Congreso de Estados Unidos en las elecciones de mitad de mandato del 8 de noviembre, critica las medidas de Biden y acusa que sólo han fomentado la inmigración ilegal.
Desde que se creó el Título 42, en 1994 y retomada durante el mandato de Donald Trump, se estima que la CPB ha expulsado a México y a otros países de la región a 1.7 millones de migrantes que llegaron a Estados Unidos en busca de asilo.