Por primera vez una sonda de la NASA, la Parker Solar Probe, logró “tocar” el sol, ya que voló a través de su atmósfera, marcando así un hito en las misiones de la agencia espacial estadounidense.
La Parker Solar Probe tomó muestras que permitirán saber de qué está hecha la estrella y su influencia en el sistema solar, lo que permitirá averiguar más sobre el universo, de acuerdo con Thomas Zurbuchen, administrador asociado de la Dirección de Misiones Científicas de la NASA.
"Este hito no sólo nos proporciona conocimientos más profundos sobre la evolución de nuestro Sol y sus impactos en nuestro sistema solar, sino que todo lo que aprendemos sobre nuestra propia estrella también nos enseña más sobre las estrellas del resto del universo", dijo en un comunicado.
La sonda solar fue lanzada en 2018 con la misión de viajar hasta seis millones de kilómetros, para entrar y salir rápidamente de la atmósfera del sol y realizar mediciones del entorno solar con un conjunto de instrumentos desplegados detrás de un grueso escudo térmico.
El 28 de abril pasado, Parker cruzó el límite crítico del borde exterior de la corona, que es el punto en el que el material solar que normalmente está unido al Sol por la gravedad y las fuerzas magnéticas, se libera para salir al espacio.